viernes. 26.04.2024
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Planes de seguro para hogar y seguros de vida

Los temas de la vida cotidiana, como retirar dinero de un cajero, atenderse en un centro de salud o comprarse un dispositivo móvil son cuestiones que tienen sus puntos en común: cuidarlos y protegerlos de las amenazas externas.

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Cómo elegir planes de seguro para hogar y seguros de vida.

¿Alguna vez se cuestionaron colocar un seguro en el hogar? Bueno, contratar seguro de vida parece no tener que ver, pero actualmente sí. Es que contratando un seguro de vida, se pueden obtener paquetes muy completos, que van desde atención médica, como seguro por robo, o asegurar los artículos más preciados en una casa.

Es decir, contratando un seguro de vida se puede obtener múltiples beneficios que resuelven muchas inquietudes de la vida cotidiana, ya que con ello se podrá asegurar desde una bicicleta, hasta la TV., un celular, y además atención médica primaria, es decir tras un accidente, o una descompensación en el hogar o cuestiones de primera atención que no necesite de equipos de alta complejidad.

Seguro para el hogar

El seguro o prestación de seguridad para el hogar es una de las opciones dentro del paquete de seguros, y será la cobertura necesaria para ciertos momentos en que necesite un auxilio, como situaciones de incendio, o de robo, o si por ejemplo baja la tensión eléctrica y se queman algunos electrodomésticos, este tipo de seguro cubre esos daños proveyendo de nuevos artículos o reparando los rotos.

Este tipo de seguros protegerán casi íntegramente el hogar desde afuera hacia dentro, desde robos hasta cualquier tipo de daños, claro que no solo tiene que ver con una cuestión de seguridad delictiva, sino que abarca situaciones que tienen que ver con la vida cotidiana.

En este sentido, el tipo de cobertura que se realizan con este tipo de paquetes, requiere de algunas cuestiones y requisitos necesarios para su contratación. Uno de ellos es el más básico, y es que el hogar debe ser permanente, ya sea que sea bajo contrato de alquiler o propiedad, debe haber constancia de que la persona o las personas que viven allí lo hacen de manera legal y de manera permanente.

Además, si es un tipo de seguro para hogar, este lugar además de ser permanente, no debe ser utilizado para fines comerciales, es decir desarrollo comercial. Además de debe ser una propiedad concluida, es decir, sin estar en construcción, ya que para asegurar una obra en construcción, otra deberá ser la contratación.

También se deberá tener en cuenta el precio del hogar, y lo que hay dentro de él, es decir, se deberán declarar los artículos, desde cantidad de televisores, hasta marcas y pulgadas, también cantidad de bicicletas si las hay, electrodomésticos siguiendo la misma lógica.

Todo esto conlleva una suma total, que puede actualizarse en caso de necesitarlo, es decir, si se realizaron cambios de electrodomésticos y artículos, y estos son más nuevos, el monto subirá, y puede ser cambiado.

Uno de los beneficios que ofrecen algunas compañías de seguro, es que una vez contratado, la cobertura se actualiza casi al instante, y con una máxima de un día, para que el hogar ya cuente con su cobertura y protección.

Cobertura para seguro de vida

Este tipo de paquetes se contratan junto a otras posibilidades de cobertura. En este caso, esta contratación ofrece un respaldo y un monto económico para una o más personas según el número del grupo familiar, ante la pérdida o fallecimiento de quien contrata el seguro.

Esto quiere decir que antes la pérdida o anulación de ingresos por fallecimiento, la familia recibe un monto según lo acordado en la póliza de seguro de vida. Además, no solo es por fallecimiento, sino que la pérdida de ingreso económico se puede dar por enfermedad, y ante esto la aseguradora respalda económicamente para que esto no afecte la economía del hogar.

Para garantizar esta cobertura, los requisitos son declarar la edad y el historial clínico y médico, además los ingresos mensuales o anuales, las propiedades o propiedad si es que la tiene, también puesto labora y algunas cuestiones que pueden variar según la aseguradora en cuestión.

Por ejemplo, en la mayoría de las aseguradoras que ofrece el mercado, la edad de tope o máxima para obtener un seguro de vida de 59 años, y por otra parte, la edad máxima para permanecer es la de 64 años de edad.