En la serie que se definió desde los doce pasos, Defensa y Justicia lo tuvo para ganar en el penal de Kevin Gutiérrez, pero el volante falló y le dio una vida más a Tigre que logró la clasificación. Unsain se había lucido tapándole los remates de Víctor Cabrera y Francisco González, aunque no fue suficiente porque en el equipo de Florencio Varela malograron los tiros de Frías, Gutiérrez y Pizzini.
El clima no ayudó para nada y complicó el espectáculo. Con una lluvia intensa durante gran parte del partido (sumada a las precipitaciones que azotaban el Gran Buenos Aires desde la mañana), la cancha pesada y muchos espejos de agua, ambos equipos desarrollaron un digno encuentro. Ofrecieron un ritmo vertiginoso y corrieron desde el principio hasta el final. No aflojaron en ninguno de los dos tiempos. Recién cerca del cierre sintieron el cansancio.
Los de Victoria se plantaron y complicaron a Defe desde el arranque. Menossi y Prediger canalizaron el juego, y arriba el goleador Pablo Magnín exigió todo el tiempo. El Halcón intentaba salir rápido y meter contras contundentes, abriendo juego con Rotondi y Pizzini. Bou se atrasó para asociarse con el medio y tener la pelota. A la pantera la buscaron bastante, y hubo algunos desniveles. Les faltó profundidad para definir en el área y asistencia para Contreras que estaba lejos y muy solitario.
La noche del bosque arropó a Tigre y a Defensa y Justicia que brindaron noventa minutos de paridad. El trámite le podría haber regalado el triunfo a cualquiera de los dos, en el tiempo reglamentario. Ya sea cuando Unsain salvó a los de Florencio Varela o en las últimas chances que tuvieron Walter Bou y Miguel Merentiel en el epílogo. El destino así lo quiso. Se encaprichó con el cero.
Beccacece sorprendió a todos cuando antes del pitazo final realizó tres cambios para enfrentar los penales. Benítez por Hachen, Merentiel por Contreras y Barrios por Rotondi. Fue una apuesta que el azar que conllevan la tanda de los penales derribó.
El martes tiene un desafío enorme ante Boca en la Bombonera. El Halcón de Florencio Varela apunta todos los cañones al único objetivo que le queda: el torneo de la Liga Profesional.
